miércoles, 22 de marzo de 2023

 Entender el personaje

(personalidad) de otr

os los vuelve sumame

nte predecibles.

Creo que, por seguridad, 

uno debe ser lo contrario: 

Impredecible, arrítmico, ir

regular.

Creo que hay algo fundamental que nos une a todos.

Creo que comienzo a aceptar la imperativa hedónica como el último esfuerzo humano necesario.

Ejemplo: Cuando uno juega, ej. las trais, el placer es comunal—todo deja de existir más que el momento, como en el sexo.

En el juego los prejuicios, juicios y postjuicios se anulan. Vemos a El Otro como igual, risueño, en el éxtasis del momento, y florece una sola mentalidad de bienestar y apoyo mutuo.

Creo que a través del juego se devela, fundamentalmente, quienes somos (somos todos al mismo tiempo). Hoy se nos incita al miedo y la competencia.

¿Es que la naturaleza es así? Difiero. 

Yo no me quiero quedar animal

¿por qué no trascender(lo)?