¿Puede ser que entre más me apalabre menos auténtico soy?
Porque, efectivamente, cada que termino escribiendo impongo una nueva realidad.
¡El mero hecho de que leas esto lo comprueba! Y no hay escapatoria—de
la ¸.•´¯`•¸¸.•..> 𝐩𝐫𝐞𝐬𝐭𝐢𝐝𝐢𝐠𝐢𝐭𝐚𝐜𝐢ó𝐧<<..•.¸¸•´¯`•.¸¸ de las
𝕡𝕒𝕝𝕒𝕓𝕣𝕒𝕤 —
a h o r a estás en mi 𝓶𝓾𝓷𝓭𝓸.
Pero sí, cada palabra parece ser otro estrato que inmediatamente envejece, otro juicio probablemente innecesario que, por alguna razón, me dije, o bien, anuncié públicamente (creo que es eso, cuando lo "anuncio"—por eso he tratado de ser lo más ambiguo posible últimamente porque creo que "aburre mortalmente" el ser definido).
Me aprovecho de la meta-hyperrealidad de las redes sociales para jugar: ¿dónde comienza mi persona(je) digital y mi "yo autentico"? ¿Cómo es que puedo más satisfactoriamente comunicar mi mensaje y expresiones emocionales? La pena o vergüenza es una virtud arcaica en mí, por lo que carezco de restricciones creativas. Por eso concuerdo con esta noción del actor de "espectaculizarse" en un sentido "celebratorio", lo que predica en cierta sentido el daoismo zhuangziano (léase el pasaje cuando muere su esposa).
Creo que fundamentalmente ya estoy encontrado mis nociones básicas de "sentido y razón" en este mundo, lo cual consolida mi personalidad, otrora embestida por
¿por qué 𝓮𝓻𝓮𝓼 𝓽𝓪
𝓪𝓪𝓪
𝕒𝕒𝕒
ⓐⓐⓐ
A
A
A
𝓪𝓪𝓪𝓷 𝓬𝓪𝓵𝓵𝓪𝓭𝓸?
tantas veces que hasta yo mismo me pregunté
¿es que "ser callado" está mal?
Describo mi perspectiva de la vida como la del:
𝓐𝓷𝓪𝓻𝓬𝓸-𝓐𝓻𝓵𝓮𝓺𝓾í𝓷 𝓓𝓪𝓸𝓲𝓼𝓽𝓪.
¡Mira su atuendo! ¿A poco no es más acorde a nuestra vida? ¡Mira de sus dedos salen rayos!
Anarco en un sentido rebelde: Admito que me rebelo contra la sociedad porque me parece que muchas cosas me son injustas tanto personal como colectivamente. Se relaciona con el personaje del arlequín al ser el único capaz de "enfatizar" esos detalles y "espectaculizarlos, burlarse" sin somerterse a juicio <<déjalo, es que "así es">>.
Arlequín porque hago de la comedia lo que podría decirse "forma y técnica" goethiana de miarte, y de criticar al mundo. Creo que la risa es la lingua franca ( ¿ y si las tensiones se modularan por la sinceridad de nuestra risa ?). Creo que todo juicio se diluye con el chiste: Con la observación ingeniosa, "anárquica" del mundo, y promueve una dialéctica verdaderamente fluida, a través del juego, otra noción importante en mi punto de vista. Hacer de cada momento un juego (científicamente comprobado), un goce, o bien algo para aligerar el peso del memento mori. Por eso me intriga mucho conocer las "dinámicas de juego" matemáticamente. ¿Qué sería de un mundo donde la competencia sea lúdica y no por sobrevivir?
Daoismo porque no lo puedo explicar, y debo de creer en algo que no tiene explicación.
Concluyo que literalmente todo depende de mi y el mundo que quiero vivir y compartir. Nunca hubo "quién está bien y quién está mal" porque nadie realmente está seguro—es decir, me engañaron, pero a su vez era muy incrédulo aún. La visión de El Anarco-Arlequín Daoista me sienta bien para proseguir mi vida.
Creo que el daoismo es una de las filosofías de la vida más brutales (porque ataca nuestro ego (lo literalmente único que existe (lo cual las personas se aferran hasta la más agonizante y última fibra de sangre y músculo de él)). Una vez desprendido, de lo único que "realmente existe", se siente un amor natural, incoherente, inefable, no porque no existan palabras para definirla, sino que el infinito no sería suficiente... Uno decidirá si darle risa o no. Y sólo añoras paz. Sólo queda burlarse de quienes prefieren el conflicto.
Tras esto, creo que aún así me palabrerizo mucho: Siento que debo encontrarme en más formas más allá de la palabra, como lo es a través de la música, o dibujos—es verdad, realimentar el resto de nuestros sentidos automatizados por La Máquina Capitalista.
Verdaderamente ¿me siento muy bien?