Me estoy dando cuenta que es inevitable tomar un personaje.
En esencia uno nunca dejará de ser quién es, pero sí es necesario "actuar" de ciertas formas ante escenarios u obras que suceden en la vida, ya sea por que te llegan o porque las ocasionaste. En mi caso cada vez me siento más insatisfecho con algunos proyectos en donde he participado últimamente. Aunque, estos siendo amateur, tampoco requirieron mucha crucialidad en su desarrollo mas que el compromiso por hacer que sucedan. Pero, aún así, me ha tocado ver cierta falta de dirección hacia algo más sustancioso, rico y significativo, y se prefiere dejarlo meramente en el "allí se va", tanto de quienes dirigen como de quienes participan.
En cuanto al grupo de teatro: Tomé la decisión de retirarme una vez finalizada mi participación en la obra de este mes. Me iría porque logré mi objetivo (estar en una obra de teatro), pero también porque creo que puedo encontrar algo más formal y profesional, algo más acorde a mi energía física e intelectual. No critico éste en lo absoluto, pero sí noté, así como otros participantes que ya se retiraron, falta de compromiso y orden, así como de seriedad en el proyecto.
En cuanto al jam musical: Me di cuenta que si no doy mis ideas, parece ser que cosas que para mí resultan tanto básicas como necesarias y mínimas simplemente nadie las concibe. No estoy diciendo que sea superior ni mejor en ningún sentido, pero el anhelo por planear algo decente parece ser que a muchas personas se les escapa y aceptan cualquier idea o sugerencia sin meditarla o ver cómo puede acoplarse a la idea base, que en este caso, nuevamente, si no la digo, seguiríamos en un limbo creativo como sucedió el jam pasado.
Siempre me ha cansado la idea de liderar y dirigir un proyecto. Lo digo porque sé que conlleva mucha inversión de energía y tiempo, pero sobre todo, el lidiar con otras personas y su ego me resulta completamente agotador. Pero, si quiero mejorar profesionalmente, no queda de otra, porque ese es el camino que se ha de tomar. Debo tomar ese personaje, tanto en proyectos pagados o no, no importa—no quiero que mi vida se base en mediocridades.
Esta es probablemente la inquietud que no supe articular en un principio con mi psicólogo, con quien he agendado una cita para platicarlo lo más pronto posible y seguir construyendo este camino al que me dirijo. Y me viene bien ahora mismo porque varios objetivos de vida están comenzando, por fin, a materializarse en mi mente: Primero las pienso, luego las pienso seriamente y al final las planeo y ejecuto formalmente.
La edad nunca me ha importado y tampoco lo veo como algún tipo de escala o tiempo que delimite mi accionar en este mundo, pero creo que muchas cosas se han organizado temporalmente en mi vida para darle un cierre formal a quien fui durante mis 20s y permitirle la entrada al nuevo "Óscar" que ha emergido entre todo este torbellino tornasol—mi alma se ha reorganizado.
A veces me pongo a pensar ¿qué sería de mí si no hubiese conocido a ciertas personas? ¿Qué sería de mí si no hubiese vivido estas experiencias? ¿Yo solo me habría dado cuenta de las reflexiones que me han llevado a mutar? No lo sé, pero no importa—pasó, y se trata de fluir con ello. Lo que sí creo es que, al final, uno sí atrae a las personas y sucesos correctos, que necesitamos, y eso puede que hable de nosotros: Como espejos, que cuando nos miramos el uno al otro, nos develamos infinitos.