sábado, 10 de octubre de 2020

Veblen, Mingus y el ocio conspicuo



Encontré el libro "The Theory of the Leisure Class" de Thorstein Veblen por culpa de Charles Mingus  y su álbum de 1957 "The Clown". Tras investigar un poco la razón de ser de esta obra maestra, encontré que Mingus tenía la idea de narrar el descenso hacia la amargura (tal vez suicidio) de aquellas personas puras, en el sentido que no buscaban aprobación económica ni de estatus– les era suficiente compartir lo que realmente eran con otros, por ejemplo un payaso, de corazón, que sólo busca hacer reír por lo ameno de ello.

En este álbum, el sexteto escribía musicalmente el progresivo pudrimiento de ánimo que un payaso sufría por el cinismo, hipocresía y simpleza del público. Éste ya no reía con chistes planeados, ingeniosos, pensados, no, ahora lo que los rompía eran accidentes, burlas, sufrimiento ajeno. Todo verdadero artista piensa y ejecuta su obra con paciencia, pero la gente ya no celebra el esfuerzo ni dedicación, sólo lo mediocre, llamativo, polémico, hiriente. No es necesario mucho pensar para encontrar el paralelismo de esta situación con la vida (post)-moderna.


Pues, ¿por qué sucede ésto? Excavando más profundo esta conjetura, encontré el libro de Veblen, "The Theory of the Leisure Class", el cual describe perfectamente la (nula) sociedad actual. Criticaba el orden consumista: cuando las empresas provocan la necesidad artificial de consumo en la gente. La gente, como mencioné, realmente no es tonta, la hacen, la manipulan– obviamente sabe que no necesita tal o equis cosa "nueva, avanzada, de último modelo", pero aún así lo hace. ¿Para qué lo querrá? ¿Qué necesidad tendrá para ello? Para ella, lo material está resuelto incluso con productos viejísimos. Lo único que queda es lo ilusorio, lo imaginario. ¿Y qué hay más imaginario y mentiroso que el propio "ser" de uno mismo? Queda inflar un estatus y ego inexistentes.
Bibliografía: